Mujeres kichwa y mapuche intercambiaron sus experiencias de economía autónoma

En el marco del proyecto «Bordando con Violeta» -arpillera colectiva que desde junio ha recorrido distintas localidades de la Araucanía- se congregaron en Temuco un grupo de artesanas indígenas para intercambiar sus saberes en torno al emprendimiento y la creación con pertinencia territorial.

Superar la pobreza mediante la riqueza cultural con enfoque de género, fueron algunos de los temas que surgieron entre las mujeres creadoras mapuche y kichwa que asistieron al «1er Encuentro de Mujeres Emprendedoras de Pueblos Originarios», que se realizó el miércoles 3 de agosto en dependencias de la UFRO.

La presidenta de la Cooperativa mapuche Witraltu Mapu de Padre Las Casas, Claudia Cariqueo, contó al público -en su mayoría mujeres- la experiencia de vivir de la artesanía mapuche asumiendo las formalidades legales que requiere el sistema. Pese a esto, destacó la independencia económica que surge de este modo de trabajo y el goce de saberse autónomas. Al finalizar, hizo una observación respecto a ciertas trancas con las que deben lidiar en el proceso: «yo no sé por qué hacen reformas si a veces los estamentos no están preparados». Crítica que contó con la afirmación de varias de sus compañeras.

Por su parte, Esthela Cerda, presidenta de la agrupación amazónica Ahuano Warmi, viajó desde la amazonía ecuatoriana para relatar la experiencia de asociar 460 mujeres artesanas de muñecas patrimoniales. Sus materiales:cerámica endémica, pelo de pita y otros materiales que recolectan personalmente de la selva. Tras el encuentro se mostró entusiasmada por el regreso a sus labores: «De cada cooperativa y asociación voy a llevar las diferentes historias a mi país para dialogar con mis mamacitas», dijo agradecida.

De las mismas tierras llegó Diana Astudillo, investigadora de la Universidad Regional Amazónica IKIAM. En la exposición, destacó la importancia de la investigación acción: desarrollando proyectos comunitarios que aportan en temas de género y economía solidaria, además de sistematizar la sabiduría ancestral para colaborar en su preservación. Hace un año y medio hizo una alianza con Esthela y la agrupación para estudiar la economía de las agricultoras, con la finalidad de dar justicia a la calidad y costo de sus labores. Ejercicio que devino en un Centro de Pensamiento de las Mujeres Kichwa de la comunidad El Ahuano, el cual refuerza temas de economía, cultura y agrobiodiversidad.

El encuentro estuvo apoyado por Sercotec y contó con la presencia de la presidenta regional, Paula Moncada: «La idea es que Chile incorpore un capítulo constitucional sobre los Pueblos Originarios y ahí están ustedes invitadas a proponer: el estado debe abordar esos ámbitos desde su visión», dijo a las presentes, en su mayoría mapuche.